lunes, 17 de junio de 2013

DECALOGO MARIANO

DECALOGO MARIANO 

(Texto inspirado en un decálogo de monseñor José María Conget Arizaleta, obispo de Jaca desde 1990 hasta su muerte en octubre de 2002)
1.- Honrar a María como a la Madre de Dios. María es la mujer del pueblo en quien Dios obró las mayores maravillas y en quien Dios puso su morada entre nosotros en Jesucristo. 
2.- Contemplar a María en toda su grandeza. Es Inmaculada y llena de gracia, Virgen y Madre, Asunta a los cielos y glorificada, primacía y prenda nuestras, modelo de todas las virtudes e intercesora de todas las gracias. 
3.- Admirar a María en toda su sencillez. Tan grande y tan pequeña, María es la humilde esclava del Señor, la "anawin", la pobre de Yavé. 
4.- Mirarnos en María como en un espejo. Es la llena de gracia. En el espejo de su vida y sus virtudes se reflejan nuestras vidas y se proyectará su luz de conversión y gracia. 
5.- Dios a María no le ahorró sufrimientos. Es también la Virgen de los Dolores y de la Soledad. Es la Virgen de la solidaridad y de los todos los que sufren. Es la Virgen de la Esperanza. Ella es consuelo y esperanza de un pueblo peregrino. 
6.- María nos llama a constantemente a hacer lo que El nos diga. Como en Caná, María quiere ser siempre el indicador de los caminos de Jesús. 
7.- María ruega constantemente por nosotros, pecadores. Ella es el auxilio de los cristianos, el refugio de los pecadores. Ella vuelve a nosotros esos sus ojos misericordiosos. Ella nos llama siempre, con su ejemplo e intercesión, a la conversión. 
8.- Es la Madre de todos los hombres. Tuya y mía también. De los cercanos y de los lejanos, en especial, de los pobres y de los necesitados. 
9.- María nos quiere hijos de la Iglesia. Ella es la Madre de Dios. Y nadie puede tener a Dios por Padre si no tiene a la Iglesia por madre. 
10.- Y María es el camino y la plenitud. Ahora en anticipo y después de este destierro en totalidad, nos muestra a Jesús, "fruto bendito de su vientre". Ella nos muestra y nos guía hacia la Patria Eterna, hacia la Familia del Cielo. “Ella es figura y primicia de la Iglesia que un día será glorificada”.